La Policía interceptó ayer al mediodía un Peugeot 308 blanco en la avenida Aconquija al 1.700 porque este vehículo estaba mencionado en la comisión de un delito. En el interior viajaban su dueño, el mediocampista de Atlético Tucumán Alejandro Melo, y el delantero Fabio Álvarez, quien acababa de darle al club una de las mayores alegrías: metió el gol que los clasificó a la semifinal de la Copa Argentina. “El auto fue comprado de buena fe hace una semana, o hace 10 días, en una concesionaria”, explicó el presidente del club, Mario Leito.
Los jugadores fueron trasladados hasta la Dirección General de Investigaciones, donde quedó secuestrado el auto. En cuanto a ellos, quedaron libres y algunas horas después estaban entrenando con el plantel. “No se tomó ninguna medida porque se mostraron los documentos de la compra. Ellos iban a buscar comida cuando los paró la Policía con la orden de secuestro. Se los está acompañando legalmente desde el club, pero no están comprometidos de ninguna manera ante la Justicia. Además, están bien de ánimo”, agregó el mandatario del club.
En cuanto al incidente que arrastra el automóvil, Leito comentó lo que pudo saber. “Al parecer, se cometió un delito hace un tiempo atrás y durante ese episodio se fotografió este coche. La titular del vehículo era una señora de Chaco. La trajeron a declarar y dijo que lo había vendido. Esa persona que adquirió el rodado también declaró y dijo que ya no lo tenía”.
Según consta en los documentos policiales, el operativo fue realizado por la división Delitos Contra la Propiedad. Mientras los efectivos solicitaban informes a la oficina de verificaciones de dominio de la fuerza, en medio de la avenida comenzaron a acercarse decenas de curiosos que intentaron entorpecer la medida. Por este motivo, se trasladó al vehículo y a los jugadores a la capital tucumana. En cuanto al pedido de secuestro, se pudo saber que fue solicitado por la fiscalía VIII°, a cargo de Adriana Giannoni, pero no se conoció cuál es el supuesto delito en que estaría involucrado el vehículo.
Durante la tarde de ayer, el club emitió un comunicado en el que desligaba a los jugadores de cualquier situación anómala relativa al automóvil.